Cuanto más cerca está el verano, más llenos están los gimnasios. De éste tema hablaba hace tiempo @David Díaz Gil en su entrada para Vitónica en la que explicaba cómo no ser un preplaya.
Estas
nuevas caras llegan con la ilusión de conseguir, en pocos meses, un cuerpo para el verano, con más ganas que
conocimiento.
Fitness Científico te ayuda a que tus primeros días en el gimnasio no sean los últimos, con varios consejos.
Partimos
de la base de que un cuerpo no se construye en meses, ni siquiera en años, pero
hoy puede ser el día para comenzar.
1-
Sé
paciente y fíjate un objetivo. Ten claro cuál es el
motivo por el que vas al gimnasio.
Fíjate
un objetivo a largo plazo, y dentro
de este varios a corto plazo que te motivarán a ir al gimnasio cada día,
siempre siendo paciente y dándole el valor que se merece a cada pequeño avance.
2-
Evalúa
tu progreso. Está estrechamente relacionado con el
primer punto. Para ello puedes pesarte
e incluso medirte los diferentes grupos
musculares cada mes, ya que únicamente
basar tu progresión en el espejo puede frustrarte, por la lentitud del
cambio.
También
puede ayudarte anotar la variación de peso de semana a semana, siendo siempre
consciente de nuestras posibilidades.
3-
Sigue
una dieta equilibrada.Ten claro que ni el mejor y más
duro entrenamiento del mundo te ayudará a progresar si no cuidas tu alimentación.
Para ganar peso, deberás comer más y mejor,
incrementando la cantidad de proteína e hidrato que comes al día, de aquí el famoso arroz y pollo.
En internet encontrarás
numerosas dietas genéricas que te ayudarán a orientarte, aunque siempre es
recomendable que esto sea trabajo de un experto
en nutrición.
4-
Suplementos.
Los
suplementos o batidos de proteína, como
su propio nombre indica suplementan tu
dieta. Ni son tan malos como algunos creen, ni hacen milagros como dicen
otros.
Te
servirán de ayuda, tomados principalmente después del
entrenamiento.
5-
Búscate
un compañero. Mejor si tiene un nivel parecido al tuyo. Además de hacerte más amenas las sesiones,
te dará ánimo en tus peores días y viceversa. Si no caéis en la trampa de
hablar y estáis motivados, vuestras sesiones serán mucho más intensas.
6-
Calienta,
hidrátate y estira. Antes,
durante y después de entrenar respectivamente. Son detalles que marcan
la diferencia, y que aumentarán tu
rendimiento
7-
Planifica
una rutina.Una vez comenzado el enteramiento, no se
trata de probar todas las máquinas por orden de llegada. Cuando entras por la puerta deberás tener claro lo que vas a realizar,
y por supuesto, en qué orden.
No
es necesario que lleves una rutina compleja, al menos al principio, lo sencillo es lo más efectivo. Aquí encontraréis todo lo que necesitais saber.
8-
Respetar
los descansos. Es uno de los principales errores del principiante. Los músculos crecen cuando descansas, y
tan importante es un buen entrenamiento como el descanso entre series,
ejercicios y sesiones.
9-
Trabaja
todos los músculos por igual. Todos los músculos son
necesarios para que otros luzcan con plenitud. Una buena espalda no luciría jamás
sin unos hombros fuertes. Otro grave
error es dejar de lado el entrenamiento de pierna, siendo uno de los
músculos más grandes e importantes
Otra cosa que deberás tener clara es que los abdominales se consiguen en la
cocina, no en el gimnasio. No se marcan por ejercitarlos mucho, lucen
cuando no tienes grasa en el abdomen, algo que sólo se logra con la dieta.
10-Se
constante y ambicioso. Son las claves del éxito. Lucha cada día y no te conformes
con poco. Sea cual sea tu estado, el
margen de mejora siempre es muy amplio.
Fitness Científico
quiere que entiendas estos 10 consejos
como la base del proceso de aprendizaje constante de este deporte que tanto
nos apasiona, basados en la constancia
y en los hábitos saludables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario